lunes, julio 03, 2006

Un niño meditando


"Señor, esta noche te pido algo especial.

Quisiera convertirme en un televisor y ocupar su lugar aunque sea por poco tiempo. Quisiera vivir lo que vive la tele de mi casa. Es decir, tener un cuarto especial para mí y reunir a todos los miembros de la familia a mi alrededor.

Quisiera ser tomado en serio cuando hablo. Convertirme en el centro de la atracción al que todos quieren escuchar, sin interrumpirle ni cuestionarlo.

Quisiera sentir el cuidado especial que recibe el televisor cuando algo no le funciona.

Quisiera tener la compañía de mi papá cuando llega a casa, aunque esté cansado por el trabajo, y que mi mamá me busque cuando esté sola y aburrida, en lugar de ignorarme.

Quisiera que mis hermanos se pelearan por estar conmigo.

Quisiera divertir y entretener a todos, aunque a veces no les diga nada interesante.


Quisiera vivir la sensación de que lo dejen todo por pasar un momento a mi lado.

Señor, no te pido mucho. Sólo quiero vivir lo que vive cualquier televisor".